Infimo

Entre escombros que nadie juntó, en un baldío al que ni los perros frecuentan, desde las profundidades insondeables de las cunetas camufladas bajo cientos de camalotes. El premio al desconsuelo, al que se fue haciendo para abajo y serruchando su propio piso. El impostor que un día se volvió auténtico y logró engañarse a sí mismo. Al sepulturero que llegó al fin de sus días solo y nadie lo enterró. El infinito llegó para decirles que dsp tampoco hay nada. Así que más vale hagan lo que tengan a mano para no necesitar a nadie, y extiéndanla al que la necesita. Sólo por hoy. Es imperceptible el cambio que se describe en el mundo cuando el mensaje divino se vuelve cotidiano, en la pequña vivencia. Pero cambia una eternidad de lamentos secos. Estéril campo abrevado por roedores y plagas. Brevajes inútiles dotados de patas de murciélago y dientes de león. Insulso remedio para mortal enfermedad. Volátil curación para cuerpos infectados. Corazones estancados a las12 del día anterior al aniversario que no llegó. Estacas clavadas a la puerta avisando de las largas vacaciones. Volver, a esta altura, no parece menos desalentador.