Desencuentro

Y eso que le dije que no iba a ir... qué raro, pensé cuando escuché el bocinazo; y era él, quién más: qué hago?, mi hermano estaba pero era al pedo mandarlo, no iba a entender por qué yo no le decía personalmente. Bueno, me decidí y fui yo, vestida como estaba desde que me levanté... ta bien, admito que podía decírselo desde la puerta; pero mis neuronas ya iban hasta el portón más o menos, cuando bajó el vidrio como diciendo: deténte, je, je, je. Y nada, lo obvio, a menos que me vaya en camisón, no iba a ir a la facu, por lo menos (y no vestida así) no todavía... –Ahh, bueno... –Voy dsp... –Bueno! –Bye, gracias. No sé qué más dije, encima agité mis brazos como saludando o agradeciendo, ¡signo ok! En qué habré estado pensando? Ta bien que el vago no ve un pedo pero tiene anteojos y no es boludo... Q habrá pensado? Mmmm.