Hasta

Volver a fojas cero, en estas circunstancias, resulta o verdaderamente imprescindible o absolutamente imposible. Cuando formé mi alter ego la doté de 3 características esenciales: ensimissmundo debía ser auténtica, comunicativa y perfeccionista. El primer descriptor se establece ya inicialmente como 'el fiel reflejo de lo que soy'; el segundo enlaza lo anterior a la idea general y necesidad fundacional del blog: la de 'contar, encontrar, compartir'; y el tercero es una derivación de todo lo anterior: 'Porque si normalmente soy inestable, acelerada y resultatista (o inquieta, impaciente y exitista), cuando puedo separar lo que soy de lo que me gustaría ser, en un contexto que nació para la diversidad, para pensar con tiempo y detenimiento, para lanzar nuestras miserias y condenar las ajenas; en una idolatrización de mí misma, que lleva mi nombre y mi estampa; no puedo ser mediocre. Debo salir de mi ordinariedad para entrar a la magia de cambiar sin tratar'...
Hasta en los peores momentos, traducidos en la inevitable realidad demandante de medidas drásticas -para salvaguardar lo bueno que quedaba-, subsistió en su fuerza creadora la magia de este blog. No pude desentenderme de él, como no se apaga el sol por taparlo con un dedo.
Hoy miro las páginas de este diario y me veo a mí misma, atravesada una y mil veces por una energía que tanto puede generar como destruir, exponer públicamente como reservarse la mejor parte.
Hoy me veo a mí misma intentando saltar la red y tocar las vértebras justas para demostrar, infielmente, que escribiendo y contando la vida puede llevarse bien con uno mismo.